“María y Sergio, tenéis que venir a mi cole para hablar del viaje”, decía Lara en una carta que les envió a Perú o Colombia, hace unos meses.
Y ayer, María y Sergio (o sea, los viajeros de slowcicle, que acaban de volver tras recorrer durante un año América del Sur en bici) cumplieron su promesa.
La cita fue a las 15.00, en la clase de 3º Infantil A del colegio Hilarión Gimeno. Mostraron fotos y mapas, hablaron de las diferentes maneras de viajar, del equipaje de un ciclista, de las diferencias entre países, de los niños de acá y allá, de animales, de casas y de comidas. Tuvieron delante un público exigente, entusiasta y muy curioso.
Si el éxito de una conferencia se mide por el número de preguntas, está claro que María y Sergio triunfaron. Aquí van algunas dudas de los niñ@s de 5 y 6 años (las que me dio tiempo a apuntar, yo estaba de espectadora): “¿No os cansabais? ¿Llevabais tiritas? ¿Y una bañera? ¿Se pueden llevar juguetes? ¿Qué comíais? ¿Cenabais dentro de la tienda de campaña o fuera? ¿Teníais mesa? ¿Desayunabais colacao? ¿Cómo se llaman los niños de América? ¿Cómo se llama ese niño de la foto? ¿Y su papá? ¿Los cactus pinchan? ¿Los niños tienen zapatos elegantes? ¿Solo tienen unos zapatos? ¿Dónde está la tele de esa casa? ¿Hay electricidad? ¿En ese sitio vive toda la familia? ¿Todas las palomas de todos los países comen pan? ¿Dónde estaba el wáter? ¿Ese wáter no tenía cadena? ¿Comíais patatas fritas? ¿Cómo es que hacéis las fotos tan bien? ¿Cuántas patas tienen las langostas? ¿Haréis más viajes?…
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Haremos más viajes. Conoceremos más langostas. Iremos a wáteres sin cadena. Desayunaremos colacao. Preguntaremos, esta vez sí, el nombre del papá y de la mamá. Comeremos más patatas, y hasta más arroz con pollo. Quizá valoremos llevar una bañera. L@s niñ@s del Hilarión son un un público exigente, pero agradecido. Mereció tanto la pena…
Es impresionante la capacidad de asimilación y entendimiento que tienen los niños y niñas con 5 y 6 años. A los adultos nos parece que no entienden muchas cosas pero hacen preguntas muy lógicas que nos hacen sonreír y a veces no sabemos como responder. Si somos capaces de fomentar su curiosidad y damos respuesta a sus preguntas, seguro que llegarán a ser personas adultas libres y responsables.
Gracias a Ana Belén, la profesora de 3ºA de Infantil del Colegio Hilarión Gimeno, por valorar y llevar al aula experiencias distintas que contribuyen a una educación integral de nuestros niños y niñas.
Que ilusión me hace leer esto. Hoy he comentado con Sergio y María que les pareció la experiencia y me he visto de nuevo en mi clase en la cual pasé y disfruté tantos años con esas increíbles e inesperadas preguntas de l@s niñ@s de esta edad. Además ayer estuve en mi Cole porque cada año con motivo del inicio de La Primavera se hace una fiesta preciosa. Pude saludar y ver a mis ültim@s alumn@s, que ahora están en 4º de Primaria, y sí, como dice «la nadadora» es importantísimo despertar esa curiosidad y aprovechar sus ganas de «Saber»…